Bueno, pues he tenido una nueva idea:
The legend of Zelda moderno: No soy un fan acérrimo de esta saga, pero tampoco es un secreto que en cada juego, Link y Zelda sean personas distintas. Se cree que dichos personajes son los descendientes de otros Link y Zelda de otro juego, así desde Skyward sword, un juego que demostró definitivamente que el Wii Motion Plus es una mierda como un piano. Bueno, a lo que vamos: Si Zelda y Link se van reencarnando en sus descendientes de forma infinita... ¿Significará que cuando Hyrule sea una gran civilización como cualquier ciudad del mundo actual... Ambos seguirán reencarnándose? Puede parecer algo descabellado, pero si Nintendo se esfuerza, puede conseguir un récord en ventas con este juego, sería como dar un nuevo aire de originalidad a la leyenda de Zelda pero manteniendo el estilo clásico. Link sería un estudiante que vive en un campus universitario, todo comenzaría cuando el compañero de habitación de Link le despertase diciendo que ha hecho un gran descubrimiento. Su compañero sería un aficionado a los videojuegos apasionado por los mitos y leyendas antiguas.
Le diría que pasó la noche en vela estudiando sobre la "antigua y olvidada leyenda de Zelda", y que según sus cálculos, muy pronto retornaría el malvado para apropiarse del poder ancestral de la Trifuerza.
Link, un skater deportista solo preocupado de disfrutar su vida, pasaría en estéreo de las advertencias de su compañero de habitación, hasta que comenzasen a aparecer monstruos en el campus, por lo que decretarían el toque de queda.
Una noche, Zelda (O cualquier otro nombre que quisiesen ponerle), la chica de la que está enamorado Link, no habría vuelto a las habitaciones tras las clases y el protagonista estaría preocupado, así que decide ir a buscarla a pesar del toque de queda y de los monstruos. Antes de salir, el compañero de habitación de Link le diría: "Es muy peligroso ir solo por ahí a estas horas de la noche", y le ofrecería su bate de béisbol.
Acto seguido, tendríamos que buscar a Zelda por el campus sin que los encargados de mantenimiento nos viesen y nos mandasen de vuelta a nuestra habitación.
Al final, encontraríamos a Zelda atada a una silla en el laboratorio de ciencias, pero una fuerza oscura haría que Link perdiese el conocimiento.
Al día siguiente, Zelda habría sido dada como desaparecida y a Link le habría caído un castigo por no respetar el toque de queda a pesar de las advertencias.
El héroe sospecha que el profesor sustituto de química, Ganondorf, un tipo muy siniestro (Imaginadle con unas gafas redondas de montura delgada y una chaqueta con coderas) , tiene algo que ver, así que decide colarse en su despacho y husmear entre sus cosas, cuando descubre varios objetos con el símbolo de la trifuerza (Podría aparecer también una ocarina, seguro que eso volvería locos a muchos fans), entre ellos una espada. Sin embargo, el profesor descubriría a Link con las manos en la masa y lo echaría de su despacho con una ira desproporcionada, aunque nuestro héroe se habría logrado llevar una de esas cinco monedas con la trifuerza marcada que Ganondorf tenía en el cajón.
Horas después, tras enseñársela a su compañero de habitación, este le diría que es muy posible que Gandondorf sea el malvado del que habla la leyenda, así que Link regresaría al despacho de Ganondorf y robaría la espada suprema.
A lo que el profesor respondería en mitad de clase diciendo que algún vándalo ha robado una espada que era una reliquia de familia con mucho valor sentimental y que cuando descubran al culpable lo expulsarán de la universidad.
Tras las clases, Link seguiría a Ganondorf, suponiendo que tiene a Zelda atrapada en algún lugar, pero termina acabando en una antigua fábrica abandonada llena de trampas y puzzles que tendremos que superar.
Al final descubriremos que, efectivamente, Ganondorf tiene retenida a Zelda en una jaula de cristal.
Después de eso, Ganondorf huiría y tendríamos que partir en su búsqueda.
Podría haber algún que otro guiño al espectador, como que Link tuviese una moto a la que llama Epona o que el dinero fuesen billetes con rupias dibujadas.